LOCURA
Quiso llorar el poeta
y no lo dejaron.
Lágrimas de sal
atormentaban a su alma inquieta.
Dejó su tierra,
ocultó su tristeza,
se disfrazó con sonrisas
huyó entre la maleza.
Quedó sin tinta el escribiente,
su corazón ardía,
mientras la locura
se apoderaba de su mente.
Al verse con grilletes
gritó libertad.
Cayeron dos lágrimas
lo abandonó la suerte.
Un campesino lloraba,
nadie impediría esta muerte.
Un pañuelo cayó
mientras una moza suplicaba.
Dos tiros sonaron,
de bruces contra el suelo
el poeta su sangre derramó,
todo quedó quieto, ya lo mataron.
Silencio ensordecedor,
gritos callados.
Quiso el poeta llorar
y no lo dejaron.
Núria De La Torre
2012-08-30
IBSN 13 - 07 - 1978 - 10